Narcisistas: cómo se protegen del Fracaso

narcisistas

Una nueva investigación muestra las formas en que los narcisistas se recuperan del fracaso.

La experiencia del fracaso es una de las menos agradables para las personas. Cua... Leggi la Bio
narcisistas

Una nueva investigación muestra las formas en que los narcisistas se recuperan del fracaso.

La experiencia del fracaso es una de las menos agradables para las personas. Cuando tu peor temor se hace realidad, y has fallado en un examen o una competición importante, el efecto sobre tu autoestima puede ser doloroso. Las investigaciones sobre las reacciones a la experiencia del fracaso en el trabajo muestran que el miedo real a perder puede llevar a los líderes a ganar más poder e influencia. Sin embargo, como podéis imaginar, incluso quienes ocupan posiciones de poder pueden verse afectados de forma diferente por la pérdida. Un líder que normalmente se preocupa por los demás y por el bienestar del grupo se sentirá triste por el fracaso, pero no necesariamente devastado.

De lo contrario, las personas que sólo piensan en sí mismas, por ejemplo, los narcisistas graves, podrían sentirse alterados por la pérdida, lo que revela que son inadecuados. ¿Podría su grandioso sentido del yo y los títulos convertirse en un mecanismo para mantener su sentido de superioridad?

 

Narcisistas y fracaso: el estudio

En un estudio del 2015, Ulrich Orth y Eva C. Luciano, examinaron para la Universidad de Berna la relación entre el narcisismo y las experiencias de eventos estresantes, incluido el fracaso, en la autoestima de las personas. En lugar de considerar este proceso como un camino de ida, los autores suizos descubrieron que las personas con narcisismo severo pueden estar provocando sus propias experiencias de pérdida y fracaso debido a sus delirios de grandeza.

Este proceso de “selección” indica que el individuo narcisista, debido a sus efectos negativos sobre las personas, puede tener más probabilidades de tener reacciones negativas en el transcurso de su vida. Por el contrario, si el proceso de “socialización” está más presente, los acontecimientos estresantes pueden ser perjudiciales para la autoestima de la persona narcisista. Según este modelo, perder puede llevar al narcisista a rebajarse unos cuantos niveles.

Orth y Luciano estudiaron una variedad de eventos estresantes:

  • el rechazo de la pareja;
  • graves problemas relacionales;
  • separación o divorcio;
  • ser víctima de una catástrofe o de violencia;
  • enfermedad o muerte de un ser querido;
  • ser detenido o acusado de un delito;
  • sufrir un fracaso en el trabajo o en la formación;
  • el desempleo y problemas financieros.

Entre 328 adultos jóvenes y 371 adultos que participaron en el estudio, los resultados apoyan la interpretación de selección de que las personas con un alto nivel de narcisismo experimentan más eventos estresantes. Sorprendentemente, al experimentar estos eventos, las personas con narcisismo severo no muestran efectos negativos en su nivel de narcisismo.

 

¿Es el narcisismo un rasgo estable?

Los estudios suizos sugieren que las personas con narcisismo severo son más propensas a fracasar, pero que el fracaso no parece afectar su sentido del yo. Según este enfoque, el narcisismo es un rasgo estable. Orth y Luciano definieron más o menos la posibilidad de que existan fluctuaciones en el narcisismo que pueden ocurrir a diario. Su enfoque no permitió, por lo tanto, comprobar si las personas con altas puntuaciones de narcisismo muestran un descenso de estos rasgos inmediatamente después del fracaso hasta que no logran seguir adelante con sus propios recursos de grandeza. Estos recursos pueden incluir:

  • culpar a otra persona del fracaso;
  • minimizar la importancia del fracaso;
  • denigrar a los ganadores.

En lugar de examinar el narcisismo sólo como un rasgo cualitativo, los investigadores de la personalidad y su potencial de cambio a lo largo del tiempo han aumentado sus estudios sobre las vacilaciones momentáneas que pueden producirse a diario en la personalidad. Este trabajo puede permitir desentrañar las relaciones de personalidad en los eventos en tiempo real.

 

Grandeza y vulnerabilidad de los narcisistas

En el último estudio sobre el narcisismo se utilizó este enfoque. En la Universidad de Pittsburgh, Elizabeth Edershile y Aiden Wright (2020) señalaron que “las principales teorías del narcisismo sugerirían que los individuos narcisistas no siempre son consistentes en la presentación de sus aspectos narcisistas” (p.2). Por lo tanto, su nivel de narcisismo tiene dos componentes: grandiosidad y vulnerabilidad. Estos varían con el tiempo, impulsando su “disfunción observada”. De hecho, los autores citan pruebas clínicas que apoyan este patrón en aquellos pacientes que pueden presentarse en una consulta terapéutica un día como increíblemente grandiosos, sólo para revelar una mayor vulnerabilidad más tarde.

Utilizando dos muestras de estudiantes universitarios y una muestra de adultos de la comunidad, llegaron a casi 900 participantes. Edershile y Wright recopilaron varias evaluaciones cada día durante 10 días utilizando un cuestionario para smartphones de 90 minutos. Estas pruebas evaluaron el “nivel de estado” (sentimientos en el momento) de grandiosidad, vulnerabilidad y autoestima.

Los ítems que impulsan la grandiosidad incluyen la evaluación de los adjetivos “glorioso”, “prestigioso”, “brillante” y “poderoso”. Los adjetivos utilizados para medir la vulnerabilidad fueron “menospreciado”, “incomprendido”, “ignorado” y “amargado”. La medida de autoestima pedía a los participantes que se calificaran a sí mismos con una consigna como “Ahora siento que tengo cierto tipo de buenas cualidades”. Antes de estas evaluaciones diarias, los participantes también completaron medidas del “rasgo” de narcisismo que implicaban su nivel general de grandiosidad y vulnerabilidad.

Utilizando complejos y sofisticados programas de análisis estadístico que evalúan el intervalo de tiempo, los autores implementaron estas evaluaciones momentáneas en un modelo que les llevó a sacar tres conclusiones principales.

Primero:

Las personas predispuestas a un mayor nivel de narcisismo muestran tanto grandiosidad como períodos ocasionales de vulnerabilidad, pero su nivel de estas cualidades varía diariamente.

Segundo:

Las personas con altos niveles de narcisismo tienen altos niveles de vulnerabilidad y bajos niveles de grandiosidad a lo largo del tiempo, rara vez experimentan incluso altos niveles de grandiosidad temporal. Por último, los niveles más altos de rasgos narcisistas, como la valoración, se convierten en una clave para predecir factores como el anclaje diario de los cambios en la grandiosidad y la vulnerabilidad. Los autores creen que estos hallazgos apoyan la observación del narcisismo desde un enfoque triangular que incluye la dimensión de la valoración así como estos exámenes ordinarios en términos de grandiosidad y vulnerabilidad.

Edershile y Wright creen que un enfoque evaluativo temporal proporciona una imagen más clara de la vida de una persona con altos niveles de narcisismo. Los que tienen una grandiosidad elevada tienden a encontrar formas de mantenerla en lugar de tener momentos de vulnerabilidad, pero los que tienen una gran vulnerabilidad muestran pocos signos de exhibir grandiosidad.

 

Narcisismo grandioso y fracaso

Lo que los hallazgos de la Universidad de Pittsburgh dejan sin resolver son las fuentes de la variación diaria experimentada, específicamente, por los narcisistas grandiosos. Como señalaron Orth y Luciano, las personas con un alto nivel de narcisismo crean sus propios fracasos que, en cambio, no alteran su nivel general de narcisismo. Quizás estas regresiones son las que, desde su perspectiva, llevan al narcisista grandioso a experimentar momentos de vulnerabilidad antes de que la grandiosidad vuelva a tomar el control. Como puede ver, pues, la psicología de la personalidad se está alejando de la evaluación del rasgo narcisista como una entidad totalmente fija. Cuando, finalmente, esa evaluación momentánea pueda aplicarse a hechos concretos, los investigadores sabrán más sobre la dinámica interna de la calidad del narcisismo y sobre su evolución en el tiempo.

En resumen, es bueno poder recuperarse del fracaso. Sin embargo, en el caso de los narcisistas, estas pérdidas no sólo pueden ser más frecuentes, sino que es menos probable que tengan un efecto beneficioso en su capacidad de maduración.

 

¿Quieres saber más sobre el narcisismo?

▶️PULSE AQUÍ y lea ahora otro artículo sobre el tema

 

Artículo traducido y adaptado libremente. Fuente: PsychologyToday.com

 

Cómo los padres pueden convertir a sus hijos en narcisistas

Cómo los padres pueden convertir a sus hijos en narcisistas

¿Qué es lo que convierte a la gente en narcisistas? En los últimos años, ha ocurrido una aparente explosión de una identidad propia dañina, especialmente en los jóvenes que son más ansiosos e inseguros que las generaciones anteriores. Sin embargo, al mismo tiempo, parece que anhelen y se esperen un mundo mejor. Pero ¿por qué ocurrió eso?

A pesar del título provocador, el Dr. Grant Hilary Brenner, en PsychologyToday.com no quiere echar la culpa a los padres, sino argumentar que, por lo que concierne las cuestiones intergeneracionales, todos están implicados, pero nadie es el culpable.

 

Narcisismo sano vs narcisismo patológico

El narcisismo en sí mismo es un rasgo normal y saludable de la personalidad. ¿Cómo es posible disfrutar de un autocuidado sólido, una autoestima sana, una autocompasión o una seguridad sin un narcisismo bien estructurado? Ser capaz de establecer relaciones sanas con los demás requiere que cada persona involucrada sea capaz de equilibrar sus necesidades con las necesidades de los demás.

Esto también requiere un narcisismo adaptativo, que va más allá de la co-dependencia y la autosuficiencia extrema. Las parejas que carecen de narcisismo sano caen en patrones repetitivos y dolorosos de falsa intimidad y ciclos de hostilidad destructiva. Sin un narcisismo suficientemente sólido, es imposible tener cordura en una relación.

Entender el narcisismo patológico es algo muy importante, ya que nuestra civilización se complica y se fragmenta cada día más. Las tecnologías potencialmente deshumanizadoras y aislantes nos dominan y amenazan con reemplazar las relaciones reales con unas ficticias. Al mismo tiempo, es igual de importante cumplir con la promesa de crear nuevas maneras de entablar relaciones que trasciendan el espacio físico y faciliten también el crecimiento durante la adversidad.

 

Cómo criar a niños narcisistas

Con el fin de aclarar el papel que juegan los padres en la educación de hijos en con narcisismo patológico, las investigadoras Charlotte van Schie, Heidi Jarman, Elizabeth Huxley y Brin Grenyer (2020) llevaron a cabo un estudio que examina los factores clave potencialmente importantes, examinados por primera vez en un grupo.

Han analizado factores como la hiperprotección y a la crianza helicóptero (en ingés, helicopter parenting), la sobrevaloración, la lenidad y el maltrato, en un grupo de 328 personas de entre 17 y 25 años, la mayoría de las cuales (el 77%) eran mujeres, y les pidieron que rellenaran un formulario que presentaba los siguientes parámetros:

Inventario de Narcisismo Patológico (INP). Este informe distingue dos tipos de narcisismo: grandioso y vulnerable. Las tendencias grandiosas se expresan a través de preguntas sobre fantasías grandiosas (en inglés, grandiose fantasy), explotación y mejora personal a través del sacrificio. Las tendencias vulnerables se reflejan en una autoestima contingente, vergüenza, subestima y la ira que surge de la presunción.

Parental Bonding Instrument (PBI): el PBI pide a los participantes que piensen en cómo fueron criados y que reporten recuerdos de aspectos clave de su relación con los padres. Hay tres subescalas: cuidado, hiperprotección y autoritarismo. El cuidado abarca tanto actitudes cálidas como actitudes frías, incluye empatía y falta de comprensión, aceptación y rechazo.

  • Hiperprotección: haciendo referencia a una escala de seis entradas, los participantes estimaron cuánto intrusivos eran sus padres y en qué medida se esforzaron para minimizar los potenciales riesgos.
  • Autoritarismo: esta escala de siete entradas se refiere a cuánto restrictivos son los padres con respecto a cuánta libertad brindan, aproximándose a la lenidad.
  • Sobrevaloración de los padres: los participantes recordaron el grado de sobrevaloración de los resultados obtenidos y cuánto les elogiaban desproporcionadamente. Estos factores se estimaron con una escala de cuatro elementos, ya utilizada en otras investigaciones.

Child trauma Questionnaire (CTQ): mide cinco dimensiones de la negligencia y el maltrato infantil: abuso emocional, negligencia emocional, abuso físico, negligencia física y abuso sexual.

Los datos se analizaron utilizando el Modelo de Ecuaciones Estructurales (en inglés, Structural Equation Modeling) para buscar correlaciones entre los diferentes factores que relacionan los factores maternos y paternos con el narcisismo vulnerable y grandioso.

 

Resultados

Aunque hubo diferencias entre las influencias de las madres y de los padres, la hiperprotección fue un factor común para el narcisismo vulnerable y grandioso. Como sugiere una investigación anterior, el trabajo apoya la idea según la que la hiperprotección parental está asociada con el narcisismo en adultos jóvenes. Además, aunque la crianza de los hijos por parte de ambos los padres es muy importante, la contribución materna desempeña, en promedio, un papel más importante.

La sobrevaloración materna estaba particularmente relacionada con el narcisismo grandioso. La sobrevaloración paterna, en cambio, se asoció con un narcisismo grandioso solo cuando los participantes tuvieron padres menos atentos y más tolerantes. Un mayor cuidado por parte del padre, junto con límites más firmes, parece proteger contra la influencia de la grandiosidad y de la sobrevaloración por su parte.

Mientras que la lenidad paterna estaba parcialmente asociada con el narcisismo grandioso, la lenidad materna estaba asociada con el narcisismo vulnerable. El narcisismo vulnerable también se asoció con el abuso y el abandono por parte de la madre.

El abuso y el descuido por parte del padre no jugaron un papel importante en esta muestra, a parte del efecto protector contra la grandiosidad si el padre es cariñoso, un hallazgo poco claro, dado el importante papel del maltrato en el desarrollo. Puede ser que los factores paternos influyan en otros resultados de la personalidad, ya que el trauma infantil puede estar relacionado con otros trastornos de personalidad, además del narcisismo, en particular el trastorno de personalidad límite.

 

Otras consideraciones

En esta investigación destacan dos resultados principales:

Primero, la hiperprotección se asocia con el narcisismo patológico, tanto grandioso como vulnerable; segundo, que, al igual que con investigaciones anteriores, la personalidad y la crianza de la madre tienen, en promedio, un impacto mayor que el del padre, aunque hay mucho más que una diferencia de género.

El efecto de una madre puede no ser relevante en el vínculo madre-hijo, pero puede ser más importante quien es el cuidador principal, a pesar de su género. Las mujeres son cada vez más las principales cuidadoras, a pesar de los cambios culturales, pero incluso el efecto de la socialización, las normas de género y los factores relacionados con eso desempeñan un potencial papel. Los padres menos “tradicionales”, que trabajaban menos y pasaban más tiempo en los procesos de crianza de los hijos, tenían más probabilidades de estar sensibles durante el juego y disfrutar de matrimonios más íntimos (NICHD, 2000).

Del mismo modo, según un estudio de 2014, los padres que pasan más tiempo en el proceso de crianza muestran cambios en la actividad cerebral y endocrina, y sus cerebros convergen en una “red neuronal de cuidado parental”. Sin embargo, la conducta y la personalidad del cuidador primario, en comparación con los secundarios, contribuyen al desarrollo del narcisismo.

 

Una protección excesiva no hace bien

Se cree que la hiperprotección afecte el desarrollo, lo que conlleva menos oportunidades para aprender del fracaso o desarrollar una “armadura” y la creación de un choque al pasar de la familia hiperprotectora al “mundo real”, donde a las personas no les importa un cuerno.

De hecho, investigaciones anteriores sugieren que resolver las ansiedades de los niños impide que los niños aprendan a lidiar con la angustia y la incertidumbre, factores que contribuyen a todo tipo de problemas en edad adulta.

Asimismo, la sobrevaloración y la lenidad pueden socavar varios desarrollos adaptativos. Obtener elogios sin ganárselos lleva a una visión distorsionada del mundo, visiones equivocadas de cómo se relacionan la recompensa y el compromiso, y una comprensión escasa de cómo establecer límites en situaciones de adultos. Aprender estas habilidades en un dormitorio universitario sin la guía adecuada puede solo echar leña al fuego.

El maltrato aumenta el impacto de la crianza parental en la personalidad, lo que lleva a mayores sentimientos de vulnerabilidad interpersonal. Este es, trágicamente, el caso que ocurre cuando el trauma lo causa el cuidador primario, empeorando la inseguridad con la traición y la desconfianza. La adversidad también puede transmitirse de generación en generación, afectando la crianza de los hijos de manera negativa, por ejemplo, debilitando su función reflexiva, una habilidad mental clave, necesaria no solo para la crianza de los hijos, sino también para la vida, como se demuestra en las madres traumatizadas.

 

Educación de los niños

Esta investigación sugiere lo que muchos ya recomiendan: criar a los niños para que crezcan seguros, con un sentido resiliente de sí mismos y capaces de navegar en una realidad compleja, cada vez más exigente y distrayente requiere una combinación de suavidad y firmeza. La capacidad de los padres para tolerar la ansiedad y la incertidumbre, (frente a sus propios fantasmas en el camino) es tanto importante como el apoyo para una adecuada toma de riesgos. Finalmente, el equilibrio es crucial para proporcionar elogios merecidos, con honestad y amabilidad.

Adoptar este enfoque y aplicarlo a la crianza de los hijos es complicado si otras familias, escuelas y culturas en general promueven valores pro-narcisistas de hiperprotección, sobrevaloración, lenidad e insensibilidad.

 

Fuente: traducción gratuita del artículo “How Parents Can Turn Their Children Into Narcissists” por el Dr. Grant Hilary Brenner, de PsychologyToday.com